ENTREVISTA - ASÍ ES EL EQUIPO DE PLANO A PLANO
“NO TODAS LAS EMPRESAS PUEDEN SOSTENER UN PROTOCOLO COMO EL NUESTRO. LA PROTECCIÓN, LOS EPI Y LA DETECCIÓN SON, SIN DUDA, GARANTÍA DE SEGURIDAD”
“HAY MUCHA INFORMACIÓN, PERO NO SE HA TRASLADADO A LA POBLACIÓN LA IMPORTANCIA, EL IMPACTO QUE TIENE ESTA ENFERMEDAD Y LA NECESIDAD DE INTEGRARLA EN NUESTRA VIDA”
“A MUCHOS, ESTA SITUACIÓN NOS HA HECHO PARAR, RECAPACITAR, Y NOS HA RECORDADO QUE NO SOMOS TAN INDEPENDIENTES COMO PENSÁBAMOS Y QUE SOLO TRABAJANDO JUNTOS COMO ESPECIE PODREMOS SALIR DE LA MISMA”
Madrid, 4 de febrero de 2021
Los antiguos romanos arreglaban su orden de batalla en tres cuerpos: los astados que formaban la primera línea con un frente de doce hombres, los príncipes, que suplían las bajas del frente, y los triarios, algo así como una reserva de élite. El ejército de Roma no se declaraba vencido hasta después de haber probado tres veces la fortuna de las armas.
Aunque a Blanca Velasco la primera ola le pilló en las UCIS del Hospital de la Princesa donde luchaba contra las enfermedades infecciosas, en la actualidad presenta batalla al coronavirus encargándose del control y de la prevención en nuestra compañía. Ya no está en primera línea del frente, pero Blanca sigue sin dar cuartel a este virus con una labor de la que dependemos todos para poder seguir trabajando. Como un legionario.
P: ¿Crees que las empresas están adoptando las medidas correctas en la prevención del COVID?
R: Dentro del sector audiovisual, que es el que conozco, y por supuesto en esta compañía, sin duda. En empresas como esta podemos ser, además, mucho más estrictos que en otro tipo de organizaciones, ya que tenemos los equipos, las herramientas de detección y un protocolo en el que no hay lugar para dudas: si hay un positivo, se aísla y se estudia de forma individual. Nos manejamos con mucha tranquilidad, es verdad. Lamentablemente, esto no se puede extrapolar a sistemas o poblaciones masivas donde es imposible tener ese nivel de detalle, de detección. Tampoco a empresas que no puedan dotar a sus empleados de estos sistemas de seguridad y detección. No todas las empresas pueden sostener un protocolo como el nuestro. La protección, los EPI, la detección y un buen protocolo son, sin duda, garantía de seguridad.
P: Se habla de mala gestión gubernamental, irresponsabilidad de la población… Los datos son escalofriantes y, como sociedad, parece que no aprendemos. ¿Dónde está el error?
R: Bueno, yo, que he estado en los dos lados y que llevo mucho tiempo conviviendo con enfermedades infecciosas, creo que el problema es que no se interpretan ni se entienden bien las explicaciones que nos llegan por los medios. Es cierto que hay mucha información, pero no se ha trasladado a la población la importancia, el impacto que tiene esta enfermedad y la necesidad de integrarla en nuestra vida. Es un error estar siempre esperando que baje la curva, que pasemos el pico de la ola… para intentar desligarnos del virus, y los mensajes que están difundiendo van en esa dirección. Esto ha venido para quedarse hasta encontrar una solución y hay que prestarle tanta atención como a otra cosa, sin miedo, integrando el virus en nuestra vida para no rechazarlo porque, si no, en cuanto mejoren los números, la gente se lanzará a quitarse la mascarilla, a abrazarse, etc. La población no entiende bien en qué estamos metidos y el problema no ha cambiado, es el mismo, que se permitan reuniones de un numero un día y reuniones de más o menos personas la siguiente semana transmite un mensaje contradictorio y no parece ajustarse a la realidad si miramos los datos de contagio. Al virus le da igual cuantos seamos si no se actúa con barrearas contra la infección. No es lo que nos dejen hacer, es lo que se debe hacer. Estamos cansados. Nos hablan de curvas, estadísticas y números de muertos, pero esos datos solo reflejan la destreza con la que somos capaces de contener el virus.
P: También porque nos llegan directrices contradictorias, distintas cada vez…
R: Estamos continuamente aprendiendo de la enfermedad, sin descuidar la investigación en tratamientos, vacunas y mutaciones… Todo a la vez, en todos los países con capacidad para ello. Esto implica que la información parezca ser diferente o contradictoria, pero solo son datos para sumar. Es decir, el escenario es el mismo, no ha cambiado: tenemos una enfermedad infecciosa que nos está echando un pulso y las medidas de protección son las mismas desde el principio y, hasta no desarrollar más herramientas (vacunas/tratamiento) para ganar la partida, no podemos más que hacer todo lo posible por contener la infección.
P: Explícanos qué ha pasado con las mascarillas: antes las buenas eran las quirúrgicas y ahora solo son válidas para entornos controlados…
R: Como te decía antes, todo va cambiando porque el virus muta y también porque nosotros vamos aprendiendo poco a poco. En diciembre, en un estudio de aerosoles y transmisión de COVID, se detectó que el virus aguanta suspendido dos horas en sitios cerrados sin renovación de aire, lo que implica que tiene más facilidad de la que pensábamos en un principio y esto puede ser concedido por el peso o el tamaño de los aerosoles. Por tanto, las quirúrgicas se han quedado cortas en estas situaciones y, aunque las FFP2 en principio se recomendaban para las UCIS dentro de los hospitales, ahora mismo son la opción más segura sin una ventilación adecuada o si estamos expuestos a una alta carga viral.
P: A pesar de que no son para todos los bolsillos. Y sin IVA reducido…
R: Correcto. Es una de las medidas importantes para la protección, como se demuestra en los estudios cuando hablamos de enfermedades respiratorias infecciosas. Que no sean accesibles para todos no mejora el escenario.
P: Danos una buena noticia, por favor…
R: Es un escenario muy nuevo para todos y toda la comunidad científica está volcada en anticipar posibles cambios e implementar tratamientos para defendernos ante este virus. Se sabe mucho sobre los coronavirus, se llevan estudiando años y esto, sin duda, es la gran ventaja con esta enfermedad. En el Centro Nacional de Biotecnología en Madrid (CNB) llevan más de 15 años estudiando los coronavirus. Centro donde, por cierto, han desarrollado en mi opinión la mejor vacuna hasta el momento porque demuestra una efectividad del 100%, además de facilidad de adaptación a los cambios que requiera por nuevas variantes. Ya han desarrollado vacunas antes y con excelentes resultados. Falta la fase clínica y para finales de año puede estar disponible. Para mí es una estupenda noticia que estemos desarrollando vacunas del más alto nivel de efectividad y seguridad en nuestro país.
Y no me quiero olvidar de que se está trabajando también en otros tratamientos porque sí, la vacuna, sin duda, es la manera de conseguir erradicar esta enfermedad como lo hemos hecho antes y así lo refleja nuestro calendario vacunal con otras enfermedades, pero tener un tratamiento nos ayudaría enormemente, pues las estrategias para detener esta situación serían muy efectivas y determinantes para solventar la pandemia en un tiempo más corto. En este sentido, España también tiene hoy en día fármacos en estudio con resultados muy prometedores.
Mi mensaje es mantener la guardia con las medidas que todos sabemos y llevamos implementado desde el principio. Toda la comunidad científica está trabajando a contrarreloj y a nosotros nos toca no favorecer las infecciones, algo que sí está en muchas ocasiones en nuestras manos.
P: Hablemos de falsos mitos… ¿Las mascarillas FFP2 se pueden desinfectar?
R: No conozco todas las modalidades de mascarilla, así que no puedo ser categórica. Desde luego, las de uso normal, no. Son de un solo uso y, además, hay que estar pendientes porque, si se saturan las membranas/capas, dejan de filtrar bien y, por eso, hay que seguir las indicaciones de horas de uso.
P: Cada vez vemos a más gente con doble mascarilla, ¿Esto es efectivo? ¿Cómo es la forma de ponerlas?
R: En mi caso, cuando llevo dos mascarillas es ante un contacto con un posible positivo. Para proteger la FFP2 me pongo encima la quirúrgica y, cuando ha pasado la situación de riesgo, es la que me quito al haberse quedado contaminada. La quirúrgica por dentro, hasta donde yo sé (y no estoy al día en este tema), no está recomendada, aunque sé que mucha gente que tiene síntomas o está pendiente de una prueba se la pone por debajo. Se puede ver la manera de reforzar una FFP2 añadiendo un filtro para ese fin, pero lo cierto es que cada uno se protege con lo que tiene porque el gasto es alto para nuestros bolsillos.
P: Hemos leído que es posible que las nuevas variantes de la enfermedad no se puedan detectar con una prueba PCR. ¿Qué hay de cierto?
R: El problema no es la prueba en sí, es la prueba elegida (PCR, antígenos, etc.) y lo será, creo, por mucho tiempo para detectar virus. La variante es un cambio en el virus y, si el virus ha modificado la parte que nos servía para amplificar por PCR y así determinar la presencia o no de virus, nos complica la situación porque, hasta desarrollar de nuevo la nueva pieza para la PCR, podemos tener una ventana peligrosa sin posibilidad de testar con seguridad y esto es algo muy a tener en cuenta.
Si nuestras dianas de detección (como los antígenos) son modificadas por alguna variante que cambie la proteína, la prueba de elección será PCR de nuevo porque se pondrá a punto, por decirlo de alguna manera, más rápidamente, y seguiremos detectando la infección, pero no a la velocidad actual, al menos al principio.
P: Blanca, ¿volverás a la primera línea de batalla?
R: Todavía no sé qué contestar a eso, si te soy sincera.
P: ¿Qué hemos aprendido y qué cosas buenas podemos sacar de todo esto que nos está pasando?
R: Creo que a partir de ahora la gente va a tener más presentes las enfermedades infecciosas y creo que, positivamente, vamos a implementar en nuestras vidas las medidas de higiene y la prevención. Han aumentado los conocimientos en medicina en la población y se valora más la ciencia.
A nivel interno, a muchos esta situación nos ha hecho parar, recapacitar y repasar las prioridades o intereses que perseguíamos en la vida. Nos ha recordado que no somos tan independientes como pensábamos y que solo trabajando juntos como especie podRemos salir de esta situación.