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ENTREVISTA - ASÍ ES EL EQUIPO DE PLANO A PLANO

“‘SERVIR Y PROTEGER’ NO ES MI ÚNICA EXPERIENCIA COMO ACTOR. HE APARECIDO TAMBIÉN EN OTRAS SERIES COMO ‘EL COMISARIO’, ‘EL PRÍNCIPE’ O ‘EL CASO’”

“SIEMPRE ME HA GUSTADO EL MUNDO DE LA INTERPRETACIÓN. MÁS ALLÁ DE UNA MERA FIGURACIÓN, LO QUE ME ATRAE DE VERDAD SON LOS PAPELES QUE TIENEN DIÁLOGO”

“A LOS ACTORES LES LLAMA MUCHO LA ATENCIÓN VER CÓMO ME DESENVUELVO ANTE LAS CÁMARAS SIN TENER FORMACIÓN EN ESTO”

“ME METO EN EL PAPEL CON FACILIDAD Y POR ESO EL RESULTADO ES TAN NATURAL. LO CIERTO ES YO SIEMPRE HE SIDO UN POLICÍA FRUSTRADO”

Madrid, 18 de marzo de 2021

P: Encargado de la contabilidad y a la vez actor en ‘Servir y proteger’. Tu caso es peculiar. ¿De dónde nace esta doble vida?

R: Bueno, tengo que decir que ‘Servir y Proteger’ no es mi única experiencia como actor. La verdad es que desde que estoy con César Benítez, ya en los tiempos de Boca a Boca, he salido en muchas de sus producciones. Un par de veces en ‘El Comisario’, en ‘El Príncipe’, ‘El Caso’, etc. Aunque la verdad es que eran cosas puntuales, no como ahora en la serie diaria, que tengo un papel fijo, el agente Merinero.

P: ¿Y de dónde te viene esa vocación? ¿Te has planteado dar un salto más en tu carrera?

R: Siempre me ha gustado el mundo de la interpretación. No he estudiado ni me he formado en esto, pero me gusta. Y más allá de una mera figuración, la verdad es que lo que me atrae son los papeles que tienen diálogo. Y no, mi trabajo real y donde yo me gano el sueldo es en la oficina con la contabilidad, el control de cajas y las facturas. Ese es mi trabajo de verdad. Lo otro es un hobby, una afición que me gusta mucho, pero que no va más allá.

P: Pero empezaste con papeles esporádicos y ahora tu personaje tiene una presencia recurrente en la pantalla.

R: Sí, bueno… Eso surgió cuando el coordinador de guión que había antes, Tirso Calero, me lanzó un envite y me dijo: “Voy a escribir un papel para ti, ¿te atreves?”. Y la verdad es que no me lo pensé dos veces y, ya ves, hasta ahora.

P: ¿Cómo compaginas ambas facetas: la contabilidad y la interpretación?

R: Muy bien. Aquí hay mucho trabajo a nivel contable, pero procuro organizarme y la verdad es que no hay tapones ni atrasos. A lo mejor en una semana grabo dos días de la misma forma que estoy quince sin pisar el plató. Y como te decía, es cuestión de organización. Si tengo que grabar, procuro acelerar mi trabajo de oficina en los días previos y no dejar nada a medias ni atrasado.

P: ¿Y los compañeros? ¿Cómo llevan verte a un lado y otro de la pantalla?

R: En la oficina, muy bien y respecto a los actores, tengo que decir que al principio fue toda una sorpresa. La verdad es que les llama mucho la atención ver cómo me desenvuelvo ante las cámaras sin tener formación en esto ni nada.

P: ¿Cuál es tu secreto entonces?

R: Yo creo que me meto en el papel con facilidad y por eso el resultado es tan natural.

P: ¿Ayuda un personaje como el agente Merinero en esa empatía que dices?

R: Me siento muy identificado con mi personaje. Más allá de que tiene fama de que le gusta mucho comer y que es algo en lo que ambos coincidimos (risas), lo cierto es que yo siempre he sido un policía frustrado.

P: Esto último sí que es una sorpresa… ¿Cuántas vocaciones profesionales tienes entonces?

R: Pues verás, la verdad es que siempre quise ser policía. De hecho, siendo joven se lo dije a mi padre y él, que tenía amigos en el Cuerpo, llegó a planteárselo. Pero, finalmente, en casa nos pudo el miedo a una profesión de tanto riesgo y vieron que era más seguro que me dedicase a mis estudios y olvidase un poco esto de la Policía. Pero sí, lo cierto es que hubiera sido inmensamente feliz integrando el Cuerpo y más aún como policía secreta, que es algo que me llama muchísimo la atención. De hecho, en ‘El Caso’, tuve la oportunidad de hacer una breve interpretación como agente de la secreta que comandaba una redada, con gabardina y todo…

P: Me han contado que te reconocen por la calle. ¿Cómo llevas esa parte de fama?

R: A mi ego particular le encanta. Además, me suelen reconocer en los sitios más variopintos. Además, como comparto apellido con mi personaje, es todo mucho más satisfactorio. Tengo que confesar que, gracias a ‘Servir y proteger’, es la primera vez que todo el mundo dice mi apellido bien.

P: Escuchando tu historia queda más patente que nunca que, efectivamente, Plano a Plano tiene un halo familiar y de cercanía que pocas otras empresas de este calibre tienen.

R: Bueno, ¿qué quieres que te diga? Para mí Plano a Plano es tan familiar como que César Benítez y yo nos conocemos desde pequeños. Fuimos juntos al colegio y nuestras familias siempre han estado muy unidas. Y luego, por otro lado, trabajar para César, por la forma de ser que tiene, es un gusto.

P: ¿Cómo definirías el ambiente que se vive en el equipo de ‘Servir y proteger’?

Es muy bueno. En mi caso particular, además, como yo estoy en los dos lados de la producción: rodaje y oficina, mi trato es mucho más cercano con todos.